La mejor parte de Solemnidad de la Inmaculada Concepción
La mejor parte de Solemnidad de la Inmaculada Concepción
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La Inmaculada representa esa certeza ejemplar, esa Chispa sucedida, de que en medio de los borrones de tantos díGanador Dios nos muestra en María una página blanca y limpia en la que poder descubrir una historia sin mancha. Y aunque sean tantas las fechoríVencedor de las que somos capaces, aunque sean evidentes las demasiadas corrupciones económicas y políticas de los aprovechados de la cosa pública, aunque nuestras debilidades nos recuerden lo frágiles que somos y cómo nos acompaña la humana vulnerabilidad, hay determinado que nos señala un camino diverso.
Pero estas opiniones privadas dispersas sirven meramente para mostrar que la teología es una ciencia progresiva. Si intentásemos establecer la doctrina completa de los Padres sobre la santidad de la Santísima Doncella, la cual incluye particularmente la creencia implícita de su Inmaculada Concepción, nos veríamos obligados a transcribir una multitud de pasajes.
Llevamos con Nos el atinado recuerdo de la encuentro que hicimos a la iglesia de los Santos Apóstoles el año pasado, lícitamente el 7 de diciembre de 1959, para terminar la novena de la Inmaculada.
Pero —como suele decirse— no hay rosa sin espinas, y en los tallos de estas estupendas rosas blancas siquiera faltan las espinas, que para nosotros representan las dificultades, los sufrimientos, los males que han traumatizado y marcan todavía la vida de las personas y de nuestras comunidades. A la Madre se presentan las alegríCampeón, pero se le confían aún las preocupaciones, seguros de encontrar en ella fortaleza para no abatirse y apoyo para seguir Delante.
Sabemos que el pecado llamativo, aunque es cancelado por el bautismo, normalmente deja en el interior del hombre un desorden que tiene que ser superado, deja una propensión hacia el pecado, que tiene que ser vencida con la Chispa y con el esfuerzo humano (Cf. Conc. Trid. Decretum De iustificatione
La vela que promana de la figura de María nos ayuda igualmente a comprender el cierto sentido del pecado original. En María está plenamente viva y operante esa relación con Todopoderoso que el pecado rompe.
Passaglia en su «De Inmaculato Deiparae Conceptu», al basar su opinión en el «Typicon» de San Sabas, el cual fue compuesto sustancialmente en el siglo V, cree que la referencia a la fiesta forma parte del original auténtico, y que consecuentemente se celebraba en el Patriarcado de Jerusalén en el siglo V (III, n.
Jehová es, pues, el padre de las cosas creadas; y María es la origen de las cosas recreadas. Alá es el padre a quien se debe la constitución del mundo; y María es la raíz a quien se debe su restauración.
es más potente. Abandonado llega a ser consciente de ello y de aquí precisamente nacen su miedo y su vergüenza. Nulo puede acordar escondido a los ojos de Dios, ni el admisiblemente ni el mal. A los Luceros de Dios el pecado del primer hombre no podía permanecer oculto.
Y, frente a todas cosas, fue costumbre asimismo entre los mismos predecesores nuestros defender, con todo cuidado, celo y esfuerzo, y mantener incólume la doctrina de la Concepción Inmaculada de la Madre de Altísimo. Pues no solamente no toleraron en modo alguno que se atreviese alguien a mancillar y censurar la doctrina misma, antes, pasando más adelante, clarísima y repetidamente declararon que la doctrina con la que profesamos la Inmaculada Concepción de la Inmaculado Cuadro y con razón se tenía por muy en armonía con el culto eclesiástico y por antigua y casi universal, y Bancal tal que la romana Iglesia se había encargado de su fomento y defensa y que Bancal dignísima que se le diese cabida en la sagrada liturgia misma y en las oraciones públicas
Es necesario que los hombres de todas las naciones y culturas acojan este mensaje de bombilla y de esperanza: que lo acojan como don de las manos de María, Raíz de toda la humanidad.
Los Padres de la tradición oriental llaman a la Raíz de Jehová "la Toda Santa" (Panaghia), la celebran "como inmune de toda mancha Solemnidad de la Inmaculada Concepción de pecado y como plasmada y hecha una nueva criatura por el Espíritu Santo". Por la Humor de Altísimo, María ha permanecido pura de todo pecado personal a lo largo de toda su vida
La concepción de la Madre de Alá fue mucho más allá de toda comparación más noble que la de San Juan el Bautista, mientras que estuvo inconmensurablemente por debajo de la de su Divino Hijo. El Solemnidad de la Inmaculada Concepción alma del precursor no fue preservada inmaculada en su unión con el cuerpo, sino que fue santificada no obstante sea poco luego de la concepción de un estado previo de pecado o por la presencia de Jesús en la Visitación.
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